El proceso de recuperación después de haberse sometido a una rinoplastia es lento y a veces desesperante. Aquí te traemos una lista de consejos que te ayudarán a recuperarte rápidamente de todos estos males.
Si tienes una pareja, amigo o algún familiar, pídeles que cuiden de ti durante las primeras 48 a 72 horas. Si pueden hacerlo durante la primera semana va a ser mejor.
Toma tus medicamentos para el dolor. Simplemente no tienes ninguna razón para sufrir. Los estudios han demostrado que la falta de dolor y estrés pueden disminuir drásticamente el tiempo de recuperación.
No olvides tomar tus antibióticos. No querrás coger una infección.
Sigue cambiando las bolsas de hielo y demás cosas que uses para enfriar la zona. Mantener la nariz en esas condiciones ayuda a disminuir la inflamación y el malestar, especialmente durante las primeras 48 horas. Ojo con la forma de colocar el hielo, ya que éste no debe aplicarse de forma directa sobre la piel, se puede usar alguna tela. El médico dará las recomendaciones con respecto a eso.
Trata de alimentarte bien. Tu cuerpo trabaja arduamente con el fin de recuperarse. Por lo menos deberás comer algunas galletas tipo Ritz, galletas de vainilla o saladas o probar otro tipo de alimentos que sean suaves. Estos bocaditos son buenos para acompañar a los medicamentos que debes ingerir. Estos evitarán las náuseas hasta que puedas comer algo más completo.
Debes beber bastante líquido, esto es sumamente importante. Tu cuerpo necesita agua para eliminar todos los medicamentos y anestesia a los cuales fuiste y estas siendo sometido. Esto debes hacerlo especialmente después que terminar de tomar todos.
No te extrañes que estarás con mucha inflamación, esto es una realidad inevitable. Pero no te enojes, esto desaparecerá gradualmente.
Algunas personas recomiendan el Daikon, conocido también como nabo japonés. Esta raíz te ayudará con el estreñimiento producido por los medicamentos para el dolor. También ayuda a purgar el sistema digestivo. Se recomienda ingerirlo después que se haya completado la ingesta de los todos los medicamentos.
Pon almohadas a tu costado así como detrás de ti. Esto permitirá el apoyo de los brazos y especialmente evitará que des giros mientras duermes, así no maltratarás tu nariz. Quédate durmiendo en esa posición por al menos 10 días.
Controla tu temperatura regularmente. Una temperatura elevada puede ser signo de una infección.
Recuerda tomar tus antibióticos en su debido tiempo. No olvides que si estas tomando anticonceptivos, algunos antibióticos pueden inhibir sus efectos. Trata de utilizar algún otro método.
Si te sientes cansado o cansada. Tómate una siesta, no fuerces a tu organismo. Recuerda que un poco de descanso ayudará con la velocidad de recuperación.
Levántate y camina un poco para relajarte. Pero no lo hagas poco después de la cirugía ya que podría causas muchos problemas. Hazlo cuando estés en buenas condiciones.
Este es un punto importante. Deja de fumar. Fumar disminuye la vascularidad y puede ocasionar problemas con el cierre y la cicatrización de la herida. También puede ocasionar necrosis (muerte de la piel y el tejido) en la zona de la cirugía.
Mantén fresca la habitación, esto ayudará a enfriar la zona sin recurrir al hielo.
Si tienes un silbato, walkie-talkie o algún otro sistema de intercomunicación, recuerda usarlos para alertar al cuidador en caso de una necesidad. Evita gritar o hacer algún otro ruido con la boca, podría dañar tu cirugía.
Tómate fotos regularmente para que le sigas el progreso de recuperación a tu cirugía de nariz.
Mantén el timbre o el teléfono móvil apagado cuando tengas que dormir. Recuerda el punto anterior, descansar te ayudará con la recuperación.
Escríbeles un correo electrónico a tus amigos, usa Facebook, Twitter o cualquier otra red social para mantenerlos informados ya que podrían estar preocupados. Algunos solo querrán chismorrear, pero otros sí estarán realmente preocupados.
La anestesia tiene propiedades amnésicas, es decir puedes olvidar los sucesos durante el periodo donde hace efecto la misma. Si lo deseas, puedes llevar un diario para que escribas momentos importantes.
Asegúrate de no tomar productos que contengan ácido acetilsalicílico (aspirinas) o beber alcohol durante varias semanas después de la cirugía, por lo menos 3 semanas.
No te deprimas pensando que tu nariz es fea debido a la hinchazón, especialmente con la del cartílago, lleva tiempo tener el resultado deseado. Por otro lado, la depresión y el estrés no son buenos para el proceso de recuperación.
Evita levantar cosas pesadas o hacer un esfuerzo sobrehumano, Hasta los 8 kilos como máximo está bien.
Puedes tomar vitamina C durante tu recuperación, pero primero debes consultarle a tu médico. Algunas veces, tomar vitamina C después de una operación puede causar formación de colágeno en exceso lo que aumentaría el tejido de la cicatriz.
Este consejo es importante. Evita agacharte, ya que si adquieres esta posición, la sangre llegará con más facilidad a la zona de la cara. Esto aumentará la presión arterial en la zona de la herida y puede provocar una hemorragia. No te agaches al momento en que tengas que secar tu cabello.
Ten cuidado cuando estas tomando los medicamentos. Algunas personas pueden confundir tomar una cada cuatro horas y tomar cuatro al día. No debes confundir las instrucciones
.Debes acudir a tus citas posoperatorias puntualmente. Esto es muy importante ya que evitarás cualquier inconveniente con la “garantía” médica. El médico puede alegar malos resultados a la falta de compromiso del paciente.
Ten cuidado con los niños, son muy inquietos y en algún momento pueden darte un disgusto con tu cirugía.
Si te duele la espalda, pregúntale a tu médico que medicamentos puedes tomar para aliviar el dolor. Podrían ser relajantes musculares.
Con respecto al punto anterior, prueba con botellas o almohadillas de agua caliente en tu espalada, pero no te duermas con ellos ya que pueden causar quemaduras.
Si eres una mujer y estas esperando que venga tu periodo y no viene, no te asustes. Los medicamentos, el trauma y la anestesia pueden haber interrumpido tu ciclo menstrual.
Finalmente lo más importante. Relájate, no te estreses y cuídate. Si sientes que algo anda mal, ponte en contacto con tu cirujano lo más pronto posible.